Los de Fomento del Trabajo nunca fueron verdaderos empresarios.


Prometo que no paro de buscarlo.
 
Sí, hace unos días leí en algún sitio ( creo que se lo oí en un vídeo a Milton Friedman, pero ahora no estoy seguro ) una muy clara diferenciación entre lo que es un verdadero empresario y lo que es simplemente un industrial "con buenos contactos".
 
Así, el primero estará preocupado por sus costes, sus clientes y sus mercados, mientras que al segundo solamente le preocupará cual va a ser la opinión sobre su asunto del ministro del ramo.
 
Pues, desde siempre, desde aquello que estudiábamos del proteccionismo de los industriales textiles catalanes y el librecambismo de los ganaderos ovinos castellanos, la patronal Fomento del Trabajo se ha caracterizado por estar más a la opinión del subsecretario ( y ahora del viceconseller ) que de a cuanto le ponen sus proveedores el kilo de sus provisiones.
 
De todos modos, ciertas actitudes ( me estoy acordando ahora de los dirigentes del F.C. Barcerlona ) a mí también se me asemejan a aquella mediatización de la política exterior de Finlandia respecto de la Unión Soviética, o de Jordania en relación a Irak, o de El Líbano frente a Siria.

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