"¡ Nada bueno, nada bueno, ... !".

Se juntan Doña Letizia y Doña Isabel a tomar la coca-cola light y el descafeinado en una terraza de El Pardo ( "donde vivía Leo Franco, que era el que gobernaba antes que Carlos III, que me lo ha dicho un señor muy "mariconchi, ... mariconchi, mariconchi, maricooonchi"", según me cuenta mi Antonio Miguel que hace poco que lo ha visitado con el colegio ) y aquí, en Madrid, se arma muy gorda.

Y yo, qué quieren, del que en verdad me compadezco es de Don Felipe, que seguro que va por ahí murmurando :

- "¡ Nada bueno, nada bueno, ... !".

Y a mí, pues eso, que me ha recordado a algo que acabo de ver hace unos días :

También en una terraza, tomando la coca-cola light, el descafeinado y la manzanilla, pero esta vez no en El Pardo sino en plena calle Madrid, estaban el otro día "platicando" un antiguo jefe mío, y sin embargo amigo, que no lacayo, y un antiguo concejal, primo suyo, para mi gusto muy apañado y, según me dijo Sonia, ya que yo "entre miope y despistado nunca me termino enterando", el padre de otro antiguo ilustre jefe mío y nunca amigo, aunque sí lo fuera de mi señora, o precisamente por eso.

Y sí, también, de camino al colegio de mis niños para recogerlos, iba yo diciendo para mí :

- "¡ Nada bueno, nada bueno, ... !".



1 comentario:

  1. Carlitos tiembla. Los Pingarrones y el Escobar atacan de nuevo

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