Desde siempre he querido visitar Cuba, y eso Sonia lo sabe.
Y, mis amigos también lo saben, siempre he querido ir antes de que Fidel muera, para ver con mis propios ojos los "logros de la Revolución".
Por eso, aún siendo novios, Sonia "se empeñó" en veranear en la "isla linda", y lo preparó todo.
Pero, cosas de la política, se encontró con que la embajada cubana en España no me daba "la visa".
Según nos dijeron, mi nombre aparecía en algún listado "político".
La cosa se pudo resolver, o al menos así me lo dijeron entonces, solicitando el visado directamente en la embajada española en Cuba.
Pero, entre tanto, ocurrió que explotó una bomba terrorista en un hotel "hermano" de en el que íbamos a alojarnos, calleron al mar dos aviones de las líneas aéreas cubanas y, además, conocimos que se estaba propagando una epidemia de "Dengue".
Y, entonces, decidimos no ir : no es que yo sea especialmente supesticioso, pero sé reconocer los malos augurios ...
De este modo, pasamos unos días en el Puerto de Santa María, y a mí, habituado a veranear en Burgos, me pareció de lo más exótico.
Luego, ya casados, parece que "Gabi" nos ha invitado innumerables veces a visitarle, pero no ha podido ser.
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