Lo confieso : ¡ A mí el que en verdad me gustaba era Rick Perry !".

Antes de nada léanse el artículo "El Tea Party sin teína" que Marius Carol publica en La Vanguardia :

Como muchas veces me ocurre en casos parecidos coincido en el análisis, aunque todo lo que el autor ve mal yo lo contemplo en positivo.

Pero, a lo que vamos, la cuestión es que parece que una vez que no podemos contar con Sarah Palin, ni con Michele Bachmann, ni con Rick Perry, y sin atrevernos a aportar de verdad por Ron Paul ( pese a las veces que nos descubrimos contemplando aquella foto suya con Ronald Reagan ), estamos los "fachas" ahora dudando entre el último clavo ardiendo que es Newt Gingrich ( ¡ Cuanto nos gustaba hace tan solo unos años ! ) y la elegibilidad del "rino, reconvertido cada día que pasa en más conservador" Mitt Romney ( ¿ Pero nosotros no eramos contrarios a esto del posibilismo ? ).

De todos modos, a mí el que en verdad me gustaba ahora era Rick Perry, lo de mi entunsiasmo por Newt Gingrich se remonta a 1998 y, bien lo sabe Sonia, ya está más que olvidado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario