No, no estoy yo muy ilusionado con el posible resultado.
No, Don Mariano no consigue emocionarme ni alcanzando los 200 diputados.
Yo con "José Mari" sí que me sentí comprometido, de hecho he comulgado con su pensamiento desde aquel día en que denunció lo de los grifos de oro en los cuartos de baño de los despachos de los consejeros castellanos y desde aquel otro en que les retiró la tarjeta visa a todos ellos.
De hecho, en vez de ocultarla, yo soy de los que presumen siempre que pueden de aquella famosa foto en las Azores.
Y, ahora, hoy, cada vez me identifico más con esa revolución liberal que en Madrid está liderando Doña Esperanza ( aunque a los que la rodean no los aguanto ).
Y sí que le doy yo su mérito a Don Mariano, y sí que le reconozco su buen manejo del partido y, aunque yo a Camps ( yo soy más de Zaplana y de Amor ) y a Don Javier ( yo soy más de Cascos) no los trago, sí que comprendo que aquello del Congreso le terminó saliendo estupendo, y también admito que "el Feijóo", "el Basagoiti" y "la Sánchez Camacho" han sido todo un acierto, y que "la Cospedal" es todo un descubrimiento.
Pero, aún así, será por culpa de la crisis, o será por estar yo ya más viejo, a mí Rajoy no me emociona y sí lo hace más por ejemplo el discurso de Cristóbal Montoro o el que podamos ver otra vez al profesor Barea en el gobierno.
Bueno, el que Gallardón abandone el Ayuntamiento y deje así de gastar los dineros que no tenemos también es un aliciente y un buen caramelo.
Y, al día siguiente, volveremos con más fuerza con la locura esa del "Tea Party" :
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