Están todos en Internet muy escandalizados.
Por lo de la "Ley Mordaza" es el revuelo.
Y lo mismo se revelan los de Alfredo Coll que los de Santos Vázquez.
Pues yo, ya saben, tengo opinión propia y se la cuento :
Veraneaba en Salou, con Sonia y los niños.
Y no, no salíamos apenas del hotel, siempre esclavizados a las comidas y los horarios de sueño de los pequeños.
Y así, desayunábamos, comíamos y cenábamos en el hotel, y desde el primer día nos conocían y conocíamos a todos nuestros vecinos de mesa.
Y, pues eso, que uno de aquellos no tuvo mejor ocurrencia que el pasearse por el comedor todos los días con una camiseta pro etarra.
Y yo, y Sonia, que por entonces aún teníamos más presentes que ahora los entierros de Gregorio Ordóñez y tantos otros, nos íbamos con cada comida calentando.
Y ya al tercer día Sonia estaba a punto de montar un escándalo, y yo de levantarme de la mesa por fin y obligarle a quitarse la camiseta al mamarracho.
Pero en eso que los de la mesa de al lado se dieron cuenta y, por ser ellos también vascos, se ofrecieron a mediar y pedirle al susodicho que dejará de hacer el ganso.
Y nuestro argumento era claro :
¡ Tan libre era él de llevar delate de todos esa camiseta como nosotros de llevar puesta otra más bestia y contraria o, más propiamente, liarnos los dos a guantazos !
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